Responsables institucionales de las regiones participantes, especialistas en biomasa y entidades socias y asociadas de Promobiomasse se han reunido hoy en Navarra para participar en el seminario final del proyecto. Esta iniciativa transnacional que ahora concluye ha impulsado la gestión forestal ambiental y económicamente sostenible, encaminada a mantener y mejorar el patrimonio forestal al tiempo que genera rentas a la población local y previene el riesgo de incendios.

En la apertura del acto, José María Ayerdi, vicepresidente del Gobierno de Navarra y consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos del Gobierno de Navarra, ha valorado positivamente los proyectos impulsados durante los tres años de actividad de Promobiomasse, por su destacada contribución a la adaptación al cambio climático y a la necesidad de abordar una profunda transición energética a nivel global.

Ha subrayado que “las propuestas realizadas permiten avanzar en el diseño y desarrollo de modelos integrados de gestión sostenible y en la progresiva implantación de la biomasa forestal como combustible verde alternativo, tanto en el parque residencial público como del sector privado. Mi enhorabuena y agradecimiento a todo el equipo de Promobiomasse, liderado por la sociedad Nasuvinsa”, ha terminado indicando.

Durante el seminario, celebrado en el Centro de acopio, transformación y suministro de Aoiz, los expertos Pablo Rodero, gestor de proyectos internacionales de la Asociación Española de Valorización Energética de la Biomasa (AVEBIOM), y Elena Baeza, jefa de la Sección de Gestión Forestal de Gobierno de Navarra, han subrayado el potencial de la biomasa como propulsora del cambio de modelo energético. Rodero ha destacado el gran potencial de la biomasa ya que es una energía barata, que utiliza tecnología avanzada y que conlleva tanto beneficios medio ambientales, especialmente para la prevención de incendios, como sociales, porque genera empleo en zonas necesitadas. Baeza, por su parte, ha indicado que Navarra en Navarra existe un alto potencial de producción de madera y biomasa de origen forestal, y por tanto, se trata de una fuente de energía que puede considerarse con km 0.

La jornada ha contado también con la presencia del director de Proyectos Estratégicos Gobierno de Navarra Rubén Goñi, el alcalde de Aoiz Ángel Martín Unzué y representantes institucionales de las entidades y regiones socias, tales como el director-gerente de la sociedad pública de vivienda y urbanismo del Gobierno de Navarra NASUVINSA Alberto Bayona, el técnico forestal  representante de Communauté de Communes Plateau de Lannemezan Jean Michel Noisette, el presidente de la Association des Communes Forestières de Pirineos Atlánticos Michel Castan, el jefe del grupo de aprovechamientos, mecanización y biomasa forestal del Centre de Ciència i Tecnologia Forestal de Catalunya Adriano Raddi, y el técnico de la Agencia Extremeña de la Energía Germán Botejara.

Un modelo propuesto por personal experto

La biomasa forestal es una energía de futuro que crea empleo en zonas rurales, reduce el riesgo de incendios, disminuye la dependencia energética del exterior y, a diferencia de los combustibles fósiles, no rompe el equilibrio de gases en la atmósfera, dado que los árboles absorben el CO2 que se emite en la combustión de la biomasa.

En el año 2018 se puso en marcha el proyecto Promobiomasse para impulsar el mercado energético de la biomasa forestal en el sudoeste de Europa (SUDOE) a través de la cooperación transfronteriza entre entidades de Francia, España y Portugal. En concreto, han tomado parte en el programa el Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña (CTFC), la sociedad pública del Gobierno de Navarra Navarra de Suelo y Vivienda, SA (NASUVINSA), la Agencia Extremeña de la Energía (AGENEX), la Agência Regional de Energia e Ambiente do Interior (ENERAREA), del norte de Portugal, la Communauté de Communes du Plateau de Lannemezan (CCPL), del departamento francés de Hautes-Pyrénées, y la Association des Communes Forestières des Pyrénées Atlantiques (COFOR64), de Pirineos Atlánticos. Además de las entidades socias citadas, han participado también otras 19 asociadas. El presupuesto total del proyecto ha ascendido a 1,4 millones de euros, de los cuales el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) aporta un millón, a través del programa INTERREG SUDOE.

Con la implicación de agentes del sector, el grupo de expertas y expertos del proyecto ha creado un modelo de gestión de la oferta y la demanda del mercado de la biomasa que aplica el concepto de “circuito corto”, similar al que se emplea para los productos agroalimentarios locales. De esta forma, se pretende solventar los problemas que aquejan al mercado energético de la biomasa, tales como el minifundismo de la propiedad forestal, los métodos de extracción poco eficientes o el desconocimiento y desconfianza por parte de la población general. El modelo consta de 67 medidas encaminadas, entre otros objetivos, a generar información actualizada y disponible sobre los recursos forestales existentes, facilitar la movilización de esos recursos, favorecer el asociacionismo, apoyar al sector forestal, fomentar la certificación de astilla y proponer instalaciones modelo desde el sector público y privado.

Experiencias piloto

Partiendo de este modelo, en cada región participante en el proyecto se han desarrollado actuaciones piloto difundidas en esta jornada final, que han servido para testar y optimizar el modelo propuesto.  Así, en el territorio de Pirineos Atlánticos se ha puesto en marcha un “Club de Usuarios” de calderas de biomasa con agentes de las autoridades locales y empresas encargadas de la gestión de las calderas de biomasa que permite el intercambio de experiencias y el aumento de las competencias de los agentes encargados de la gestión de los equipos.

En la región de los Altos Pirineos se ha desarrollado una herramienta digital de caracterización de las masas forestales que facilita la movilización de los recursos forestales de propiedad privada, asegura la trazabilidad de los productos forestales y facilita la gestión forestal.  NASUVINSA ha creado el citado Centro de acopio,  transformación y suministro de biomasa forestal en Aoiz, que abastecerá a las calderas de biomasa de los edificios de vivienda social de NASUVINSA y otras instalaciones futuras que se pudieran impulsar desde el sector público.

En la misma línea, ENERAREA ha realizado un el estudio para la creación de una red de centros de recogida y procesamiento de la biomasa residual en el centro de Portugal.

Desde AGENEX, en Extremadura, se ha actuado en las comarcas de La Siberia, Hurdes y Sierra de Gata para eliminar las barreras administrativas, legales y de estructura de la propiedad forestal y se han ofrecido cursos de capacitación técnica para la gestión integral de la cadena de valor de la biomasa dirigidos a agentes locales (técnicos municipales, empresas de biomasa, operadores de calderas y propietarios de montes).

El Centro de Ciencia y Tecnología Forestal de Cataluña, por su parte, ha impulsado modelos y técnicas de extracción sostenibles con maquinaria innovadora que mejora las condiciones de trabajo en el bosque, y ha desarrollado un proyecto de dinamización de la gestión forestal conjunta para la prevención de incendios en la Serra de Puig-Segalar (Girona).